COSTOS: CLASIFICACIÓN DE LOS COSTOS
COSTOS
Los costos, como se ha mencionado, son
fundamentales para el administrador no sólo para efectos de valuar inventarios,
sino para los diferentes procesos administrativos de la organización (planeación,
toma de decisiones, control). Dependiendo del tipo de proceso administrativo de
que se trate, y del tipo de toma de decisiones que se quiera realizar, los
costos pueden ser clasificados de diferentes formas.
CLASIFICACIÓN
1. De acuerdo con la función en la que
se incurren:
a) Costos de producción: Son los que se generan en el proceso de
transformar la materia prima en productos terminados. Se subdividen en costos
de materia prima, de mano de obra e indirectos de fabricación:
• Costos de materia prima: El costo de
materiales integrados al producto. Por ejemplo, la malta utilizada para
producir cerveza, el tabaco para producir cigarros, etcétera.
• Costos de
mano de obra: Es
el costo que interviene directamente en la transformación del producto. Por
ejemplo, el sueldo del mecánico, del soldador, etcétera.
• Gastos indirectos de fabricación: Son los
costos que intervienen en la transformación de los productos, con excepción de
la materia prima y la mano de obra directa. Por ejemplo, el sueldo del
supervisor, mantenimiento, energéticos, depreciación, etcétera
b) Costos de distribución o venta: Son los que se incurren en el área que
se encarga de llevar el producto desde la empresa hasta el último consumidor;
por ejemplo, publicidad, comisiones, etcétera.
Costos de administración: Son los que se originan en el área
administrativa (sueldos, teléfono, oficinas generales, etc.). Esta
clasificación tiene por objeto agrupar los costos por funciones, lo cual
facilita cualquier análisis que se pretenda realizar de ellas.
c) Costos de financiamiento: Son los que se originan por el uso de
recursos ajenos, que permiten financiar el crecimiento y desarrollo de las
empresas.
2. De acuerdo con su identificación
con una actividad, departamento o producto:
a) Costos directos: Son los que se identifican plenamente
con una actividad, departamento o producto. En este concepto se cuenta el
sueldo correspondiente a la secretaria del director de ventas, que es un costo
directo para el departamento de ventas; la materia prima es un costo directo
para el producto, etcétera.
b) Costo indirecto: Es el que no se puede identificar con
una actividad determinada. Por ejemplo, la depreciación de la maquinaria o el
sueldo del director de producción respecto al producto. Algunos costos son
duales; es decir, son directos e indirectos al mismo tiempo. El sueldo del
gerente de producción es directo para los costos del área de producción, pero
indirecto para el producto. Como se puede apreciar, todo depende de la
actividad que se esté analizando.
3. De acuerdo con el tiempo en que
fueron calculados:
a)
Costos históricos: Son los que se produjeron en determinado
periodo: los costos de los productos vendidos o los costos de los que se
encuentran en proceso. Éstos son de gran ayuda para predecir el comportamiento
de los costos predeterminados.
b)
Costos predeterminados: Son los que se estiman con base
estadística y se utilizan para elaborar presupuestos.
4. De acuerdo con el tiempo en que se
cargan o se enfrentan a los ingresos:
a) Costos de periodo: Son los que se identifican con los intervalos de tiempo y no con
los productos o servicios; por ejemplo, el alquiler de las oficinas de la
compañía, cuyo costo se lleva en el periodo en que se utilizan las oficinas, al
margen de cuándo se venden los productos.
b) Costos del producto: Son los que se llevan contra los ingresos únicamente cuando han
contribuido a generarlos en forma directa; es decir, son los costos de los
productos que se han vendido, sin importar el tipo de venta, de tal suerte que
los costos que no contribuyeron a generar ingresos en un periodo determinado
quedarán inventariados.
5. De acuerdo con el control que se
tenga sobre la ocurrencia de un costo:
a) Costos controlables: Son aquellos sobre los cuales una persona, de determinado nivel,
tiene autoridad para realizarlos o no. Por ejemplo, los sueldos de los
directores de ventas en las diferentes zonas son controlables por el director
general de ventas; el sueldo de la secretaria, por su jefe inmediato, etcétera.
Es importante hacer notar que, en última instancia, todos los
costos son controlables en uno o en otro nivel de la organización; resulta
evidente que a medida que se asciende a niveles altos de la organización, los
costos son más controlables. Es decir, la mayoría de los costos no son
controlables en niveles inferiores.
Los costos controlables no son necesariamente iguales a los
costos directos. Por ejemplo, el sueldo del director de producción es directo
respecto a su área, pero no controlable por él. Estos costos son el fundamento
para diseñar contabilidad por áreas de responsabilidad o cualquier otro sistema
de control administrativo.
b) Costos no controlables: En algunas ocasiones no se tiene autoridad sobre los costos en que
se incurre; tal es el caso de la depreciación del equipo para el supervisor, ya
que dicho gasto fue una decisión tomada por la alta gerencia.
6. De acuerdo con su comportamiento:
a) Costos variables: Son los que cambian o fluctúan en relación directa con una
actividad o volumen dado. Dicha actividad puede ser referida a producción o
ventas: la materia prima cambia de acuerdo con la función de producción, y las
comisiones de acuerdo con las ventas.
b) Costos fijos: Son los que permanecen constantes durante un rango relevante de
tiempo o actividad, sin importar si cambia el volumen, como sería el caso de
los sueldos, la depreciación en línea recta y el alquiler de un edificio.
Dentro de los costos fijos, existen dos categorías. Por un lado, se encuentran
los costos fijos discrecionales, que son aquellos que son susceptibles de ser modificados,
como por ejemplo los sueldos y salarios; por otro lado, están los costos fijos comprometidos, que son los que
no aceptan modificaciones, por lo cual también son llamados costos sumergidos.
En esta última categoría entraría la depreciación de la maquinaria y contratos
a largo plazo de arrendamiento.
c) Costos semivariables: También conocidos como “semifijos” o mixtos, estos costos tienen
como característica que están integrados por una parte fija y una variable. El
ejemplo típico son los servicios públicos como electricidad y teléfono, que
cobran una cuota fija por servicio más un costo variable por uso del servicio
(kilowatts, minutos de llamadas).
7. De acuerdo con su importancia para
la toma de decisiones:
a) Costos relevantes: Son aquellos que se modifican o cambian de acuerdo con la opción
que se adopte; también se les conoce como costos diferenciales. Por ejemplo,
cuando se produce la demanda de un pedido especial y existe capacidad ociosa;
en este caso los únicos costos que cambian, si se acepta el pedido, son los de
materia prima, energéticos, fletes, etc. La depreciación del edificio permanece
constante, por lo que los primeros son relevantes, y el segundo irrelevante
para tomar la decisión.
b) Costos irrelevantes: Son aquellos que permanecen inmutables, sin importar el curso de
acción elegido. Esta clasificación permite segmentar las partidas relevantes e irrelevante
en el proceso de toma de decisiones
8. De acuerdo con el tipo de
sacrificio en que se ha incurrido:
a) Costos desembolsables: Son aquellos que implicaron una salida de efectivo, lo cual
permite que puedan registrarse en la información generada por la contabilidad.
Dichos costos se convertirán más tarde en costos históricos; los costos
desembolsables pueden llegar o no a ser relevantes al tomar decisiones
administrativas. Un ejemplo de un costo desembolsable es la nómina de la mano
de obra actual.
b) Costo de oportunidad: Es aquel que se origina al tomar una determinación que provoca la
renuncia a otro tipo de alternativa que pudiera ser considerada al llevar a
cabo la decisión. Un ejemplo de costo de oportunidad es el siguiente:
c) Costos virtuales: Costos que impactan a la utilidad durante un periodo contable,
pero que no implican una salida de efectivo. Ejemplo: Depreciación, pérdidas
cambiarias.
9. De acuerdo con el cambio originado
por un aumento o disminución de la actividad:
a) Costos diferenciales: Son los aumentos o disminuciones del costo total, un cambio en los
niveles de inventarios, etc. Estos costos diferenciales pueden clasificarse en
costos decreméntales y costos incrementales. Los costos decreméntales se
originan cuando un costo diferencial disminuye por reducciones del volumen de
operación, como sería el caso de los ahorros que tendría la empresa por la
eliminación de una línea de producto. Por otra parte, los costos incrementales
son aquellos en los que se incurre cuando las variaciones de los costos son
ocasionadas por un aumento de las actividades u operaciones de la empresa, como
sucedería cuando se introduce un nuevo proceso en la línea de producción que
requiere la contratación de nuevos trabajadores y costos adicionales de materia
prima o energéticos.
b) Costos sumergidos: Son aquellos que, independientemente del curso de acción que se
elija, no se verán alterados; es decir, van a permanecer inmutables ante
cualquier cambio. Este concepto tiene relación estrecha con lo que ya se ha
explicado acerca de los costos históricos o pasados, los cuales no se utilizan
en la toma de decisiones. Un ejemplo de ellos es la depreciación de la
maquinaria adquirida. Si se trata de evaluar la alternativa de vender cierto
volumen de artículos con capacidad ociosa a precio inferior al normal, es
irrelevante tomar en cuenta la depreciación.
10.
De acuerdo con la relación en la disminución de actividades:
a) Costos evitables: Son aquellos plenamente identificables con un producto o un
departamento, de modo que, si se elimina el producto o el departamento, dicho
costo se suprime; por ejemplo, el material directo de una línea que será
eliminada del mercado.
b) Costos inevitables: Son aquellos que no se suprimen, aunque el departamento o el
producto sean eliminados de la empresa; por ejemplo, si se elimina el
departamento de ensamble, el sueldo del director de producción no se modificará.
11. De acuerdo con su impacto en la
calidad:
a) Costos por fallas internas: Son los costos que podrían
ser evitados si no existieran defectos en el producto antes de ser entregado al
cliente.
b) Costos por fallas externas: Son los costos que podrían
ser evitados si no tuvieran defectos los productos o servicios. Estos costos
surgen cuando los defectos se detectan después de que el producto es entregado
al cliente.
c) Costos de evaluación: Son aquellos que se incurren para determinar si los productos o
servicios cumplen con los requerimientos y especificaciones.
d) Costos de prevención: Son los costos que se incurren antes de empezar el proceso con el
fin de minimizar los costos de productos defectuosos.
Las clasificaciones enunciadas son las principales; sin
embargo, puede haber otras que dependen del enfoque del cual se parta para una
nueva clasificación. Todas las clasificaciones son importantes, pero sin duda
alguna la más relevante es la que clasifica los costos en función de su
comportamiento, ya que ni las funciones de planeación y control administrativo
ni la toma de decisiones pueden realizarse con éxito si se desconoce el
comportamiento de los costos. Además, ninguna de las herramientas que integran
la contabilidad administrativa puede aplicarse en forma correcta sin tomar en
cuenta dicho comportamiento; conocerlo es premisa básica para planear, tomar
decisiones y ejercer un eficaz control administrativo en la empresa.
Comentarios
Publicar un comentario